¿Qué me motivó a estudiar la especialidad en Psicoterapia de la Familia?
La riqueza de la experiencia profesional obtenida en el PANI, como psicóloga del Departamento de Adopciones, aunada al deseo de trabajar como psicoterapeuta, me impulsó a estudiar la maestría en Psicología, con énfasis en Psicoterapia de Familia. Esta fue una experiencia maravillosa que culminó en el 2005 y, en ella, pude conocer una gran riqueza, en teoría, que le dio soporte a esa experiencia que ya poseía.
Asimismo, me proveyó de una serie de herramientas y estrategias terapéuticas que antes no conocía y que han sido de gran provecho para mis clientes niños (as) y adultos. Esto me motivó a trabajar en consulta privada; atendiendo personas de todas las edades cuyo motivo de consulta trata de diversos temas relacionados con su historia de vida, sufrimientos y problemas emocionales asociados a la misma, momentos y procesos potencialmente críticos relacionados con eventos circunstanciales de la vida como por ejemplo dificultad para el manejo del enojo y la agresividad, ansiedad, atención de niños durante el divorcio de sus padres, duelos por la pérdida de seres queridos por muerte, divorcio, o por hijos no nacidos debido a infertilidad, problemas múltiples al interior de la dinámica de pareja, depresión, atención psicológica por infertilidad y adopción y otros muchos asuntos relacionados con la vida presente de las personas.